Gato robótico realista con piel sintética y cepillable. Cumple con los requisitos estándar para utilizarlo en la terapia con mascotas robot en personas con Alzheimer y otras demencias.

Ofrece un aspecto realista, como un gato de verdad. Abre y cierra los ojos, levanta la pata, abre la boca, y mueve la cabeza y el cuerpo.

Gracias a sus sensores integrados el gato responde al movimiento y a los estímulos de tacto, como caricias y abrazos, como si fuera un gato de verdad, pero no requiere ningún cuidado especial o alimentación.

Su longitud de 38,4 cm y peso de 1,81 kg hacen de él una mascota fácil de coger y tener en brazos, sin suponer un gran esfuerzo para la persona con Alzheimer.

Producto de Ageless Innovation.